Karina Avila Salazar - Museo de Béisbol
Una curiosa pelota llega a las vitrinas del Salón de la Fama y Museo de Béisbol de Venezuela. El donante lleva por nombre Oscar Zamora Conde, Ex Teniente de las Fuerzas Armadas Nacionales.
Esta esférica cuenta una historia maravillosa que nos proponemos a relatar. Se trata de una pelota autografiada por los jugadores de la selección de Venezuela que participó en la VIII Serie Mundial de Béisbol Amateur en el año 1945.
Luego de perder el valor olímpico en los juegos de Los Ángeles de 1932, el béisbol obtuvo valor protagónico tras la invitación de Japón a Estados Unidos para jugar en su país. Este evento facilitó la invitación para un juego de exhibición en los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936 en el que asistieron más de 120 mil personas. Este hecho sentó las bases para la formación de la Federación Internacional de Béisbol Aficionado (FIBA). En vista de que en más de 35 países de todo el mundo se jugaba béisbol, se organizó el Primer Campeonato Mundial, celebrado en Inglaterra. La idea de traer la competencia a América vino de la mano de la petición de la selección de Cuba para participar. Los cubanos se hicieron dueños del espectáculo, convirtiéndose en la sede mundial de la FIBA, al aprobarse por primera vez los reglamentos de la organización. Fue en 1940 que Venezuela participa por primera vez en una Serie Mundial, en su III edición en La Habana, que sirvió como experiencia para la extraordinaria actuación los criollos en el año siguiente.
No podemos hablar de las Series Mundiales de Béisbol Amateur sin nombrar a los Héroes del 41. En una Venezuela aun saturada por la dictadura gomecista, sin entender muy bien eso de hacer país, da un paso a la modernidad bajo la repercusión del campeonato de la IV Serie Mundial de Béisbol Amateur en Cuba. En una época que la venezolanidad se vivía a través de sus escasos medios de comunicación, el periodista Herman Ettegui el 23 de octubre de 1941 escribe: ¡Viva Venezuela! ¿En qué otra forma podríamos comenzar esta reseña? Francamente, de nuestras mentes no salen otras palabras. Esta narrativa nos hizo darnos la oportunidad de reconciliarnos con ser venezolano, a través de este sentimiento genuino, y nos convertimos en un país donde la historia del béisbol es la historia de Venezuela. En 1942 y 1943 Venezuela se quedó en el camino, siendo Cuba el ganador consecutivamente. No obstante, Caracas se consagró como la sede para los próximos dos años, venciendo a México en la VII Serie del año 1944. De este campeonato también recordamos a nuestra Reina Yolanda Leal, quien resultó la ganadora de la primera elección democrática en Venezuela.
Bajo esta breve introducción, ahora si entramos en materia con respecto al objeto recibido. La ceremonia para la inauguración de la la VIII Serie Mundial de Béisbol Amateur el 27 de octubre de 1954 en el estadio Cerveza Caracas es la clave de esta historia. Venezuela recibió a Colombia, Costa Rica, El Salvador, Nicaragua y Panamá, a excepción de Cuba y México quienes se retiraron de la competencia. En primera instancia, se realizó un desfile de los participantes. El jugador Ramón “Dumbo” Fernandez tuvo el placer de llevar la bandera de Venezuela. De esta manera, se izó la bandera de todas las naciones, para unas respectivas palabras de Antonio Bríñez con el juramento del deportista. El Presidente de la Federación, Pablo Morales, dio por inaugurada la serie y por designación de la junta patriótica la el primer lanzamiento fue hecho por el Teniente Oscar Zamora Conde, en representación de las Fuerzas Armadas. La pelota fue autografiada por el equipo de Venezuela, con las siguientes firmas: A. Escanone, J. Casanova, L. Romero, A. Gonzalez, A Bríñez, R. Fernández, H. Benítez, R. García, V. Osorio, E. Fonseca, L. Zuloaga, A. Carrasquel, S. Pérez, D. Finol, G. Vento, V. Arévalo, J. Bracho, J. Tremaria, V. García y el mismo Zamora Conde. Ese día la selección de Venezuela conquistó su primera victoria ante el equipo de Costa Rica, con marcador de 11 carreras a 1. Es importante destacar que Venezuela se llevó el tricampeonato el 18 de noviembre de 1945, hecho histórico que dio paso a la formación de la Liga de Béisbol Profesional.
El Salón de la Fama y Museo de Béisbol se siente honrado de recibir este tesoro que nos hace reafirmar nuestro compromiso con la conservación de la historia nuestro béisbol. Extendemos las gracias infinitas a Oscar Zamora Conde por contribuir con este sueño. Por otra parte, la tarea de redactar estas líneas no hubiera sido posible sin la valiosa recopilación de las hazañas del béisbol venezolano hecha por el General José Antero Núñez y Alfredo Méndez, que hoy en dia podemos apreciar en el libro Oro y Glorias del béisbol venezolano, de donde también sacamos las fotografías de la época.
La reliquia formará parte de la exposición permanente de la sala 4, dedicada al béisbol amateur (1895-1945). Extendemos la invitación a todos los aficionados del béisbol y su historia en Venezuela al Salón de la Fama y Museo de Béisbol en el Centro Comercial Sambil Valencia.
